Neem : util en el tratamiento natural de la Enfermedad Periodontal

Por Juliette Rivera,

www.bienestarybalance.com

En tiempos pasados la mayoría de la gente no poseía la cultura del cuidado dental, recuerdo cuando era niña mis padres ni siquiera me compraban cepillo dental, no procuraban que lavara mis dientes y solo me llevaban con el dentista cuando la pieza estaba picada por caries. Las familias eran numerosas, la vida era más sencilla pero menos fácil que hoy, aun así teníamos algo a nuestro favor: la alimentación era más natural.

Desde hace unas cuantas décadas el exceso en el consumo de alimentos chatarra y dulces demasiado ácidos ha producido una gran incidencia de caries y problemas dentales en edades muy tempranas que ha hecho que pongamos más atención a nuestra higiene bucal.

Es ahora cuando se ha dado a conocer un padecimiento que no solo es causa de molestas y costosas visitas al especialista dental sino que pone en peligro la salud de quien lo sufre y que es conocido como gingivitis que es mucho más común y peligroso de lo que muchos piensan.

Tiene su mayor incidencia en personas con 35 años o más, y ya sea porque no ha sido bien diagnosticado o porque a veces muchos lo ignoran, este padecimiento puede convertirse no solo en un problema de estética sino de salud serio y llegar a contagiarse a la pareja por transmisión directa según lo aseguran algunos especialistas.

Todo comienza cuando algunas de los posibles 300 diferentes tipos de bacteria que pueden encontrarse en la boca empieza a adherirse a las piezas dentales que sin el correcto cepillado y el uso frecuente de hilo dental pueden provocar placa dentobacteriana que al alojarse bajo la encía puede causar en ella enrojecimiento, inflamación, sangrado y mal aliento.

El principal peligro reside en que los síntomas iniciales no producen dolor ya que empieza generalmente con ligeros sangrados al cepillarse o un enrojecimiento sin molestias por lo que las personas no le dan importancia y por lo tanto no buscan ayuda profesional.

Si estas señales de alerta son ignoradas al cabo de algunos meses e incluso años empiezan a aparecer las llamadas bolsas periodontales o abscesos que empezaran a afectar el tejido alrededor de la pieza dental y de los ligamentos además de causar pérdida de hueso.

Comienza el dolor intenso causado por la inflamación y la infección, se produce movilidad de piezas dentales y en las algunos casos se aflojan tanto que salen por si solas. Existe además el riesgo latente que algunos reportes clínicos confirman que debido al sangrado continuo algún coagulo pueda migrar a las válvulas del corazón o que la misma bacteria pueda también afectarlo.

Si la gingivitis no es tratada a tiempo puede evolucionar a una periodontitis en donde los tejidos de soporte del diente y de los huesos empiezan a dañarse, es por eso que si existe la sospecha de sufrir este padecimiento es necesario visitar a un periodoncista quien realizara una limpieza profunda y especializada además de instruir al paciente sobre como realizar la higiene dental diaria de la forma correcta a través de una técnica eficaz de cepillado que debe incluir masaje a las encías, uso de hilo dental y pasta dental correcta.

Como siempre en todo lo relacionado con la salud la mejor medicina es la prevención, sin embargo en la mayoría de los casos no será suficiente con la higiene pues dependiendo de la fase de la enfermedad será necesario hacer uso de antibióticos específicos, limpiezas realizadas mediante un raspado y alisado bajo la encía para eliminar la placa, reconstrucción de hueso en caso de su pérdida o en el ultimo de los casos la extracción de la pieza dental.

Debido a que es una enfermedad inflamatoria crónica desafortunadamente aun con limpieza, tratamiento e incluso dolorosas cirugías el problema puede regresar, ya sea por factores externos o internos, por la predisposición propia de cada organismo o simplemente porque la boca es un ambiente fácilmente propicio para la reproducción de bacterias.

Es aquí donde podemos hacer uso de algunos aceites esenciales (aromaterapia) para lidiar con este padecimiento pues además de prevenir podemos ayudar a pelear contra estas bacterias de una manera natural, no agresiva y económica.

Los mejores enjuagues bucales que se venden de forma comercial tienen la función de actuar como antisépticos es por eso que contienen compuestos químicos obtenidos de aceites esenciales como el mentol de la Menta Piperita, el eucaliptol del Eucalipto y el timol del Tomillo.

Lo maravilloso de la naturaleza es que cada uno de estos aceites esenciales pueden llegar a tener hasta 300 compuestos químicos diferentes que actúan en sinergia perfecta para contrarrestar cualquier efecto no deseado, por lo que la manera mas segura es usar el aceite esencial en lugar del compuesto.

En el aspecto general todos los aceites esenciales son antisépticos pero algunos de ellos específicamente son poderosos bactericidas cuyos efectos han sido confirmados por sus resultados benéficos en su uso reciente en la higiene bucal como son el Neem, Mirra, Tea Tree, Tomillo.

El Neem esta surgiendo hoy como una alternativa natural que puede ayudar en el tratamiento de la enfermedad de las encías cuyas manifestaciones pueden ser inflamación, sangrado, piorrea, gingivitis o periodontitis.

Los potentes compuestos del Neem poseen un efecto desinflamatorio que ayuda a reducir las molestias, al mismo tiempo actúan aumentando la respuesta inmunológica del organismo y con su alto efecto antibacterial ayudan a combatir al estreptococo, ayudando a mantener dientes y encías sanas.

Ya existen pastas dentales con diferentes extractos de Neem, Tomillo, Mirra o de Menta cuyo compuesto principal conocido como Mentol nunca ha faltado en productos de higiene dental de marcas comerciales, que por cierto el aceite esencial de Mirra es uno de los aceites esenciales mas indicados para el tratamiento de la gingivitis, asi que si por el momento no hay disponible productos de Neem en tu pais, este aceite puede ser una excelente opcion.

Los ultimos avances en el cuidado de las encias han promovido el cepillarse tres veces al día con una pasta que contenga principalmente extracto de Neem ya que ayuda a promover una mejoria en las enfermedades periodontales, pero los resultados pueden variar dependiendo de la gravedad o de la cronicidad del padecimiento, en cuyo caso es recomendable complementar tomando al mismo tiempo por vía oral capsulas de hojas de Neem o un te preparado a partir de las hojas que podria ser igual de efectivo pero es de sabor amargo.

Todas las partes de este árbol son usadas en la India desde hace miles de años y hoy es sujeto de diversos estudios clínicos en todo el mundo por la cantidad de padecimientos en los que puede ser usado con resultados sorprendentes (lea artículo sobre el Neem en esta pagina).

Como es que conozco acerca de todo esto?... Yo misma lo sufrí.

Mi problema comenzó hace casi 12 años cuando mis encías empezaron a sangrar al cepillar mis dientes, en aquel entonces solo procuraba que nadie viera cuando me enjuagaba pero no tenia idea de lo que me pasaba.

Después empecé a tener episodios en los que la encía sangraba al comer ciertos alimentos, algunas veces esto resulto penoso para mi pues las personas que estaban conmigo empezaban a notarlo antes de yo darme cuenta.

Pero hace aproximadamente 9 años cuando comía algo que era de consistencia chiclosa empecé a notar que las muelas se movían ligeramente o a sentir que las piezas estaban apretadas.

Casi inmediatamente después aparecían abscesos dolorosos en las encías que hacían muy difícil el poder masticar la comida.

Estos abscesos empezaron a multiplicarse hasta que llegue a tener 8 a la vez, vi diferentes periodoncistas que me realizaron limpiezas profundas bajo la encía y me dieron antibióticos e incluso me vendieron enjuagues muy caros y poco efectivos.

Aun así el problema siguió, empecé a usar la homeopatía como apoyo para combatir la infección y reducir el dolor pero los abscesos cedían en algunas piezas y reincidían en otras por lo que poco a poco me tuvieron que ir sacando algunas muelas.

Hasta algunas veces llegué a pensar que era mejor quedarme sin dientes y resignarme a usar dentadura postiza, que era lo que hacían las personas en tiempos pasados, a tener que seguir batallando entre medicamentos, molestos tratamientos y reincidencia de los abscesos.

Cuando fui con la dentista para que me extrajera la cuarta y ultima pieza, que fue la mas dolorosa de todas, me recetaron un antibiótico muy fuerte indicando lo peligroso que es no atender esta infección (que en mi caso era grave) y me dijeron que necesitaba varias cirugías para reconstruir el hueso y completar el faltante quitando cartílago del paladar con un costo de US $2,500 dólares pero que aun así no podían asegurar que el problema desapareciera.

Recuerdo muy bien ese día, cuando llegué a mi casa aun adolorida pensando en la única opción que me habían dado y en lo difícil en todos estos años de luchar contra este padecimiento, me arrodillé para orar a Dios y le pedí ayuda, que me librara de pasar por esas cirugías, que si el problema era una bacteria tenia que haber algo que pudiera acabar con ella.

Mientras tanto, debido a lo drástico del procedimiento busqué una vez mas otra opinión, sin embargo el diagnóstico fue el mismo, pues cuando la especialista comenzó a medir el espacio entre las encías y la piezas dentales (la profundidad de la bolsa) había casos en los que median mas del máximo y las radiografías mostraban pérdida de hueso en 7 piezas. Fue entonces que tuve que programar las cirugías para algunos meses mas tarde pues la periodoncista tenía que realizarme un tratamiento previo.

Un buen día me encontraba en Internet buscando una solución para un problema dermatológico cuando leí acerca del árbol de Neem y cómo podía ayudar en diversas enfermedades entre ellas la gingivitis.

Me apresuré a comprar las cápsulas, una crema para mi cara y una pasta dental pues no tenía nada que perder si los probaba, reconozco que pensaba que en la piel iba a ser muy efectivo y no tenía grandes expectativas de lo que pudiera hacer para mejorar mi salud dental.

Empecé tomando 2 capsulas por la mañana y 2 por la tarde al mismo tiempo que cepillaba mis dientes 3 veces al día con la pasta dental.

A medida que pasaba el tiempo empecé a sentirme mejor cada vez, por lo que al cabo de 3 meses que ya era fecha de la cirugía pude posponerla debido al cambio que había ocurrido en mí, continué así con mi tratamiento hasta completar 6 meses y fui a consultar de nuevo a la periodoncista.

Se suponía que era fecha en la que estaban programadas las cirugías, pero al igual que en todos sus procedimientos anteriores primero empezó midiendo el tamaño de las bolsas bajo las encías, volvió a hacerlo una vez mas para verificar que las medidas estaban normales al mismo tiempo que inspeccionaba visualmente su color y estado.

Entonces muy sorprendida me preguntó si me había hecho algún otro tratamiento pues ya no veía la necesidad de tener que realizarme ninguna cirugía pues mis encías estaban completamente sanas y normales.

Entonces aproveché la oportunidad para explicarle la manera en la que estaba usando los extractos del árbol de Neem, de cómo podía ser de ayuda a otras personas y aunque me escuchó atentamente su reacción fue de incredulidad... después de todo es difícil cambiar lo aprendido a través de años de estudio por un forma tan simple de tratamiento.

Su diagnóstico fue totalmente diferente, me dijo que ya no necesitaba ningún tratamiento periodontal que incluso en un futuro solo tenía que visitar al dentista normal.

Tiempo después, al visitar uno de tantos dentistas que había consultado anteriormente, se pudo comprobar mi mejoría, incluso para verificar mi recuperación y quitar cualquier duda, me sacó algunas radiografías las cuales para su sorpresa mostraron el hueso ya regenerado.

Han pasado ya casi 10 años desde entonces y dado que los síntomas no han vuelto solo visito al especialista anualmente para mi revisión y una profunda limpieza que es requisito para mantener un buen estado de salud dental.

Creo firmemente que Dios quien creo la tierra y todo lo que en ella hay ha provisto al ser humano de esta medicina natural a través de este árbol y respondiendo a mi necesidad de una forma maravillosa y sorprendente.

Este es mi testimonio personal y creo que Dios hizo un milagro en mi, es por eso que decidido incluirlo en mi pagina para que mas personas puedan verse también beneficiadas, tal vez no puedas conseguir los mismos productos o marca, pero nada pierdes con probar si tienes a tu alcance algunos de estos aceites o derivados de esta planta, asi que espero de todo corazón que esta vivencia personal que comparto hoy contigo pueda ayudarte y puedas recuperar tu salud dental como sucedio conmigo.

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